No es un 5 estrellas como lo sería en Europa, ni de lejos, aquí no llegaría ni a un 4 estrellas. La habitación estaba limpia, las toallas las cambiaban prácticamente a diario, lo que es una barbaridad, el ascensor bastante sucio. El personal correctamente amable.
No hay ningún detalle para el cliente, ni una infusión, ni un café, ni un agua, nada de nada.
Cobran además una fianza de 150$ por noche, un gasto extra muy importante si, como nosotros, reservas 5 noches. Esto parece ser general en todos los hoteles de NY.