El personal muy atento, pero el lugar ya está viejo. El colchón gastado, el baño descuidado y hacía mucho ruido las tuberías, había bichos en el marco de la puerta y el a/a muy pequeño para el cuarto por ende a penas se siente. El área de la pisicina es acogedora, si te gusta la música colombiana, mejor aún.
En resumen, necesita mejorar. Del desayuno no puedo opinar, me lo perdí los días que estuve.