Lo mejor sin duda y a destacar la atención de Rafaela, primera vez en un hotel de Portugal donde alguien nos hace sentir tan cómodos, sin ella no hubiese sido lo mismo, gracias por tu trato!
Solo pondría 2 pegas :
Debería ser solo adultos, por que un sitio como ese, que da paz, tranquilidad y además es bastante romántico, con la piscina llena de niños salpicando y gritando te deja un sabor un poco agridulce...
Y la otra el café y el zumo de el desayuno...
No le doy más nota por esos detalles...aun así repetiremos sin duda!