Bonito hotel situado casi al lado de la concatedral de San Juan.
Habitación moderna, funcional y espaciosa. Incluye, gratuitamente, varias capsulas de café Nespresso, tetera eléctrica, etc. Es difícil ponerle una pega, quizás el ancho de banda de la wifi gratuita (2 Mbps) podría ser un poco mejor.
Terraza con bonitas vistas. El jacuzzi lo hemos dejado para el verano :)
El personal, tanto de recepción como del restaurante extraordinariamente amable y eficiente.
El desayuno incluido es a la carta. Incorpora una gran variedad de deliciosos y bien presentados platos que te dejan totalmente satisfecho.
Finalmente, Malta en invierno es un sitio increíblemente verde con lugares preciosos.
Volvería sin dudarlo en otra ocasión.