La habitación al llegar olía mucho a pintura, hacía muchísimo frio y tuvimos que dejar las ventanas abiertas para que pudiera salir el olor, cuando nos retiramos no había nadie en recepción, pero no fue mayor problema, el hotel es lindo, llegamos a la Torre Eiffel caminado aproximadamente 30 minutos, pero tiene estaciones de metro cerca para poder trasladar!