El hotel deja mucho que desear, no se entiende que aparezca con 4 estrellas. La entrada y los pasillos están heladisimos (radiadores apagados), para tomar desayuno hay que abrigarse por el frío que hace en el lugar. El desayuno es pobre y en un lugar inhóspito, con café en bolsitas, no tienen tostador....las habitaciones frías y poco acogedoras, funcionales, sin decoración; el aire acondicionado para calentar el ambiente suena mucho, la sabana de abajo en la cama no tenía elástico y era tan corta que no se alcanzaba a meter debajo del colchón, por lo que se arrugaba, el cubrecolchon tenía pelos. En la ducha casi no salía agua y estaba puesta tan arriba que había que tenerla en la mano; la goma para no resbalarse daba mucha desconfianza porque estaba toda manchada, el estractor sonaba tanto que daban ganas de tener La Luz apagada. En síntesis, solo nos quedamos porque íbamos a un compromiso muy cerca, pero nos fuimos apenas tomamos desayuno. No dan ganas de quedarse; después de ver el SPA no quisimos ver el
Gimnacio.
Solo destacamos positivamente la amabilidad de la niña de la recepción y de la del SPA.